Decoración, Iluminación

Cómo elegir apliques de luz para interiores

El aplique de luz de interior, complemento perfecto de la iluminación, es el rey de la iluminación dirigida. Los hay con detector de movimiento, de pared, con LED, con fluorescentes o en forma de foco, y pueden instalarse en cualquier espacio del hogar. Para elegir tus apliques, ¡sigue nuestra ficha consejo!

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Características importantes

  • Tipo
  • Diseño
  • Bombilla
  • Flujo luminoso
  • LED

Dónde instalar un aplique de pared


Dónde instalar un aplique de pared

Para elegir tus apliques, es importante determinar con precisión el uso y la función que tendrán en tu hogar. Un aplique para la cabecera de la cama es diferente de un aplique de pasillo, tanto por la iluminación que proporciona como por su diseño.

¡Hazte las preguntas adecuadas!

¿Vas a utilizar el aplique solo o junto con otra luz?

¿Será suficiente para realizar tareas concretas?

¿Creará un ambiente luminoso?

Estas preguntas son esenciales, ya que el haz de luz, o flujo luminoso, y su irradiación son muy distintos de una habitación a otra. ¡Tenlo en cuenta!

Y a diferencia de lo que ocurre con otros productos, es impensable usar los apliques de luz de exterior en el interior, porque su potencia lumínica es excesiva. Del mismo modo, no es posible utilizar un aplique de interior en el exterior por motivos de seguridad y resistencia.

Apliques clásicos y focos de interior: diferencias

Apliques clásicos de interior


Apliques clásicos de interior

Un aplique clásico de interior normalmente cuenta con una pantalla. Se sitúa sobre un soporte, que suele ser metálico y fijo. En ocasiones incluye una bombilla de casquillom grueso o fino (E27 o E14). Los apliques de interior están presentes en todas las estancias de la casa, pero en especial en la zona principal: la sala de estar.

El aplique clásico tiene más bien una función de iluminación auxiliar y forma parte de la decoración del hogar. La pantalla, por definición, atenúa la luz emitida.

Focos de pared


Focos de pared

El foco de pared, habitualmente compuesto por una única fuente de luz (una sola bombilla), es el otro aplique típico. Ofrece una iluminación más precisa, llamada direccional. A menudo dispone de una parte orientable y permite reforzar la iluminación de un punto específico de la estancia, como una encimera de cocina, un escritorio, etc. También encaja perfectamente en los pasillos, donde puede señalar el paso de forma original.

Apliques para cuadros


Apliques

Para resaltar un lienzo o una foto, es importante elegir la iluminación correctamente y optar por el aplique adecuado.

El aplique para cuadros en exposición se instala sobre la obra.

Además del diseño, hay que tener en cuenta el tipo del aplique, ya que los rayos UV provocan degradaciones con el paso del tiempo. Es mejor decantarse por una luz LED, pero que no sea demasiado fría ni blanca en exceso, para no alterar los colores.

Las luces de neón son también muy habituales, porque ofrecen la ventaja de emitir una luz suave con un haz de gran anchura.

Todo depende de la tecnología que prefieras, y del cuadro que vas a iluminar. Si no es un Picasso, ni el óleo de regalo de tu mejor amiga, puedes escoger el que más se ajuste a tu economía.

Apliques de cabecera con lámpara de lectura


Apliques de cabecera con lámpara de lectura

¡Esa sí que es una idea brillante!

El aplique de pared en el cabecero de la cama es cada vez más habitual y dispone de dos bombillas: una se encarga de la iluminación ambiental decorativa, mientras que la otra, móvil y más fina, proporciona iluminación direccional. ¡Es muy cómodo para leer en las noches de invierno!

El aplique de cabecera con lámpara de lectura, equipado con un interruptor de acceso fácil y rápido, es una buena alternativa a la lámpara clásica. ¡Te permite ahorrar espacio y dinero ya que solo encenderás una bombilla, en lugar de una lámpara entera!

Apliques de interior: un diseño para cada ambiente


Apliques de interior: un diseño para cada ambiente

Al elegir un aplique, fíjate en los materiales.

Para conseguir un efecto decorativo moderno, opta por el cromo o el plástico y las formas sencillas, llamadas estilizadas.

Para crear un efecto más clásico o romántico, un acabado en hierro o bronce es ideal.

Además, sus líneas y formas pueden reforzar —o no— la sensación de modernidad. Cuanto más sencillo y estilizado sea el diseño, más moderno será el aplique. Por el contrario, una forma elaborada con flores y adornos lo hará parecer más clásico. Y ya si le añadimos encaje y cristales colgantes, ¡bienvenidos al siglo XVIII!

Apliques de interior: elección de las bombillas

Al seleccionar tus apliques, es importante que prestes atención a la elección de las bombillas. En ocasiones vienen incluidas con el aplique, pero como la variedad es amplia y se trata de un producto técnico, debes informarte bien antes de tomar una decisión.

Bombillas incandescentes


Bombillas incandescentes

La bombilla incandescente es una de las más clásicas. Se instala en apliques equipados con al menos un casquillo de rosca. Su luz es suave, cálida y un poco amarillenta.

Estas bombillas ya no se fabrican ni comercializan hace años, pero quizá aún tengas alguna en tu hogar. No olvides que estás desaprovechando la oportunidad de cuidar el medio ambiente y ahorrar en tu factura de la luz.

Bombillas halógenas


Bombillas halógenas

La bombilla halógena usa un casquillo G9. Los apliques correspondientes suelen ser finos, pero requieren un transformador de 12 V.

Las bombillas halógenas también han dejado de fabricarse a partir del verano de 2018, así que no pierdas un minuto para pasarte a la tecnología LED con la que, sin duda, ahorrarás energía y contribuirás al cuidado de nuestro planeta.

Bombillas LED


Bombillas LED

El LED no emite calor y es de larga duración. El LED estándar, sin embargo, presenta el inconveniente de resaltar los colores fríos. Su consumo es bajo. ¡Tu oportunidad para ahorrar energía!

Bombillas fluocompactas


Bombillas de neón

El neón ofrece una iluminación de largo alcance y una gran eficacia luminosa, especialmente sobre un cuadro o un espejo.

Características principales de las bombillas


Características principales de las bombillas

La potencia eléctrica se expresa en vatios (W) y es la potencia consumida por bombilla, por tanto, será decisiva para determinar nuestras necesidades eléctricas.

La temperatura de color se expresa en Kelvin (K). Es el color de la luz que emite una lámpara. Una luz cálida es más bien amarilla, mientras que una luz fría es blanca. Para no equivocarte, recuerda que la llamada luz «amarilla» corresponde a 2500/3000 K, y la luz «neutra», a unos 4500 K. Por encima de esta cifra, toda la luz es «blanca».

El flujo luminoso (medido en lúmenes, ɸ) es la cantidad de luz que emite la bombilla en un segundo.

La eficacia luminosa de la bombilla elegida vendrá dada por el cociente entre el flujo luminoso y la potencia eléctrica, es decir, la cantidad de luz emitida por cada unidad de potencia.

Pero…, no te compliques, porque todas estas indicaciones suelen aparecer en los embalajes de las bombillas.

Una última recomendación: ten en cuenta el tiempo que tardará la bombilla en encenderse. Es mejor que sea rápido, ¡porque no es agradable tropezar con la cómoda en plena noche! En el embalaje suele indicar «luz instantánea».

 

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Fuente: https://consejos.manomano.es

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